Una guía para marcas de salud que quieren conectar, no solo comunicar
Una lucha silenciosa, a plena vista
Cuando el hijo de Rosa comenzó a aislarse y a faltar a la escuela, ella no pensó en terapia.
Pensó que tal vez necesitaba más disciplina. O más oración.
En muchos hogares hispanos, la salud mental no se habla. Se sobrelleva en silencio. Uno sigue adelante. Se dice: “Así es la vida.”
Pero ese silencio tiene un costo.
Para marcas y organizaciones del sector salud, ese silencio no es solo un reto comunicacional: es una brecha cultural.
Una que no se resuelve con una traducción literal.
Porque aunque digas todo “correctamente” en español, si no se siente auténtico, no va a conectar.
Y lo peor es que podría reforzar el mismo estigma que estás intentando romper.
En nuestras comunidades, el cómo se dice algo muchas veces importa más que lo que se dice.
Los límites de la traducción literal
Pongámoslo claro.
Palabras como depresión, ansiedad o terapia pueden ser técnicamente correctas.
Pero emocionalmente suenan ajenas.
Quizás escuches respuestas como:
“¿Terapia? Eso no es para nosotros.”
“Eso es estar triste. Hay que seguir adelante.”
Una campaña que diga:
“Si te sientes deprimido, busca ayuda”,
puede ser clara, sí.
Pero emocionalmente se siente lejana. Incluso amenazante.
No es que nuestra comunidad no valore la salud mental.
Es que nos enseñaron a manejarla de otra forma.
Y si tu mensaje no refleja esa realidad cultural, la gente no se verá reflejada en él.
¿Qué significa que un mensaje sea culturalmente relevante?
En Bold, ayudamos a marcas y organizaciones a ir más allá de la traducción.
Transformamos los mensajes para que reflejen las vivencias reales de las familias hispanas en EE. UU.
Eso implica ajustar no solo las palabras, sino también la emoción, el tono y la historia detrás del mensaje.
Consideramos:
- Preferencias lingüísticas según generación y región
- Un enfoque emocional que abra puertas, no que genere resistencia
- Narrativas basadas en la fe, la familia, el esfuerzo y la resiliencia
- Canales de confianza: WhatsApp, radio comunitaria, iglesias o centros vecinales
Cuando te comunicas desde el corazón de la cultura, el mensaje deja de ser una campaña.
Se convierte en una conversación real.
Veamos la diferencia
Traducción literal:
“Si te sientes deprimido, busca terapia.”
Correcto gramaticalmente. Pero emocionalmente, no conecta.
Adaptación cultural:
“Hablar con alguien no es debilidad. Es fortaleza. Cuídate, para que puedas seguir cuidando de los demás.”
Este mensaje honra el valor del cuidado, familiar y colectivo.
No impone una solución: ofrece un refugio.
Esto no se trata solo de usar español.
Se trata de hablar el lenguaje emocional de la comunidad.
¿Y cómo se llama este enfoque?
A esto le llamamos transcreación.
Pero más allá del término, lo importante es lo que genera:
- Sensación de seguridad
- Tono de respeto
- Sentimiento de reconocimiento
En temas tan sensibles como la salud mental, un mensaje así no solo informa.
Invita.
Comparativa: Traducción vs. Transcreación
Traducción | Adaptación Cultural (Transcreación) | |
¿Literal, palabra por palabra? | Sí | No |
¿Conecta emocionalmente? | No | Sí |
¿Desafía el estigma? | No | Sí |
¿Basado en valores comunitarios? | No | Sí |
¿Construye confianza a largo plazo? | No | Sí |
¿Quieres conectar de verdad con la comunidad?
Este Mes de la Salud Mental, no te conformes con traducir.
Transcrea.
La salud mental merece más que precisión lingüística. Merece empatía. Contexto. Y un profundo respeto cultural.
Eso es lo que hacemos en Transcreation Studio™: Creamos mensajes que reflejan toda la complejidad, belleza y fuerza de la vida hispana en los Estados Unidos.