En muchas de nuestras sesiones estratégicas con líderes de marketing, hay una constante: se sienten al frente de un esfuerzo importante por conectar con el consumidor hispano, pero con pocos recursos y el peso total sobre sus hombros.
Lo interesante es que muchos no se han dado cuenta de algo clave:
no están solos en esto. O, mejor dicho: no deberían estarlo.
En casi todos los proyectos que lideramos desde BOLD, hemos visto cómo las estrategias orientadas al mercado hispano no solo benefician a marketing. También impactan, y mucho, a otras áreas dentro de la organización:
- Ventas
- Servicio al cliente
- Relaciones comunitarias
- Comunicaciones internas
- Experiencia del cliente
- Incluso operaciones
Lo que parece una campaña puntual es, en realidad, una estrategia transversal que solo necesita ser estructurada con intención. En muchos casos, estas áreas no están excluidas por falta de interés, sino por falta de una visión compartida. A veces, solo necesitan una invitación clara para sumarse.
La estrategia hispana ya es transversal. Falta diseñarla así.
Muchas veces una marca se acerca a BOLD con una necesidad táctica: una campaña, una activación, una fecha clave. Pero al poco tiempo, otras áreas empiezan a levantar la mano.
Nos piden adaptar guiones de ventas. Traducir materiales de atención al cliente. Recomendar aliados comunitarios. O diseñar recursos internos más inclusivos.
Y entonces proponemos una pausa estratégica:
“¿Y si esta estrategia, que ya está impactando distintas áreas, se pensara como un esfuerzo compartido?
¿Y si otras áreas también pudieran sumarse, incluso con presupuesto?”
La colaboración no es solo deseable. Es necesaria.
Y la oportunidad de construirla está ahí, esperando que alguien la active desde adentro.
La solución: liderar desde marketing, pero no en soledad
Como líder de marketing, tienes una ventaja única: la visión de conjunto.
Y eso te convierte en alguien que puede y debe convocar.
Convocar aliados. Abrir conversaciones. Generar puentes. No se trata de repartir carga, sino de multiplicar impacto.
La pregunta clave no es “¿cómo hago esto con menos?”, sino:
“¿Con quién puedo hacerlo mejor?”
Tres pasos para activar una colaboración real
1. Identifica quién más gana si tu estrategia hispana tiene éxito
Haz una lista de áreas que podrían beneficiarse. Piensa en sus objetivos actuales y cómo tu estrategia puede ayudarlos a llegar más lejos.
2. Acércate con una pregunta, no con una petición
En lugar de pedir recursos, abre un diálogo estratégico:
- ¿Cómo interactúa tu equipo con audiencias hispanas?
- ¿Qué desafíos enfrentan al hacerlo?
- ¿Qué podrían lograr si tuvieran una solución compartida?
El tono cambia por completo: de “necesito algo de ti” a “podemos lograr más juntos”.
3. Propón una inversión conjunta (no solo apoyo simbólico)
Si más de un equipo se beneficia, tiene sentido que más de uno invierta.
Apóyate en datos, casos concretos y un pequeño business case para justificarlo. No como un gasto extra, sino como una forma eficiente de crecer sin duplicar esfuerzos.
Cuando varias áreas contribuyen, no solo se comparte la carga: se mejora la calidad de la estrategia y se genera mayor compromiso interno.
Este esfuerzo no es solo tuyo. Es una oportunidad para toda la empresa.
Liderar la conexión con el consumidor hispano es un privilegio pero no debe convertirse en una carga.
Y aunque muchas personas en marketing han asumido este rol con compromiso y pasión, sabemos que para sostenerlo en el tiempo, necesitan respaldo.
Este mes, antes de lanzar campañas para Hispanic Heritage Month, es el momento ideal para fortalecer tu base interna. Para alinear, proponer y convocar.
Porque una estrategia hispana no puede depender de una sola persona o departamento.
Debe vivirse como un movimiento compartido que transforma desde adentro.
Próximamente: una herramienta para ayudarte a dar el primer paso
Muy pronto podrás descargar nuestra nueva guía práctica:
“Cómo lograr colaboración y presupuesto entre departamentos para tu estrategia hispana.”
Una herramienta pensada para ayudarte a iniciar conversaciones internas con datos, claridad y propósito.
Porque el mercado hispano no es un reto que se resuelve en solitario.
Es una oportunidad que se conquista en equipo.